Afilado o bruñido: domina el filo de tus herramientas de cuero
¿Qué es afilar y qué es bruñir?
- Afilado (sharpening): consiste en remover material de la herramienta (hoja, cuchilla, cuchilla de corte, sacabocados afrontados) para restablecer o cambiar la geometría del filo. Es decir, cuando la herramienta se ha desgastado, tiene mellas o ha perdido el ángulo óptimo.
- Bruñido (stropping): es el paso final que pule, alinea y refina el filo ya afilado. No busca cambiar el ángulo ni remover mucho material, sino dejar la herramienta lista para un corte limpio, preciso y suave.
En el taller de cuero, ambos procesos son importantes: afilar cuando la herramienta está desgastada, bruñir antes de trabajos finos para que el filo “se sienta” perfecto.
¿Cuándo hacer cada uno?
- Haga afilado cuando notes que la herramienta ya no corta con facilidad, tira, o deja superficies irregulares. También si ves mellas o rebaba en el filo.
- Haga bruñido regularmente, tras cada sesión importante, o antes de piezas delicadas: este paso mantiene la herramienta en estado óptimo y reduce la necesidad de afilados frecuentes.
Materiales y herramientas necesarias
- Para afilar: piedras (agua o aceite) de diferentes granos, guías de ángulo, lijas de banda, etc.
- Para bruñir: tira o bloque de cuero (o gamuza), compuesto de pulido (óxido de cromo, diamante, etc).
- Accesorios de limpieza, soporte seguro, buena iluminación, protección si utilizas máquinas.
Flujo recomendado en el taller de cuero
- Limpia la herramienta: elimina residuos de pegamento, tintes o restos de cuero.
- Evalúa el filo: ¿hay mellas? ¿El corte exige fuerza? Si sí → afilar. Si no → bruñir.
- Si afilas: inicia con piedra de grano grueso para recuperar forma, luego avance a grano fino hasta lograr filo.
- A continuación, bruñido: coloca la herramienta a ángulo adecuado (igual al de uso normal) sobre la tira de cuero con compuesto. Realiza pases suaves y alternados hasta que el filo “salte” limpio.
- Limpieza final y prueba de corte: corta una tira de cuero o realiza prueba real para asegurar el resultado.
Consejos específicos para marroquinería artesanal
- Mantén el ángulo que usas normalmente en tu taller, no lo modifiques, salvo que sea necesario, para que las sensaciones de corte sean consistentes.
- Bruñe antes de piezas finales (por ejemplo, fundas que entregas) para que cada corte sea preciso.
- No uses bruñido como sustituto del afilado: si la herramienta está apagada, el bruñido tarda mucho y puede fatigar el filo.
- Guarda tus herramientas limpias y secas: la corrosión afecta el filo más allá del uso.
- Marca tus herramientas importantes (por ejemplo cuchillas de cuero) y mantén un registro de cuándo las afilaste/bruñiste: esto te permitirá planificar mantenimiento y evitar interrupciones.
Errores comunes a evitar
- Usar únicamente bruñido cuando la herramienta está muy gastada: se tarda mucho, el resultado queda menor.
- Afilado con ángulo incorrecto: puede perderse precisión en herramientas específicas de cuero (perforadoras, cuchillas de costura, etc.).
- Presión excesiva al bruñir: puede “redondear” el filo y empeorar el corte.
- Usar una tira de cuero deteriorada o compuesta inadecuadamente: el bruñido requiere buena base.
- No limpiar bien tras el afilado/bruñido: residuos metálicos pueden contaminar el cuero.
FAQ
¿Cada cuánto debo bruñir?
Depende del uso: para herramientas de corte frecuentes, un bruñido ligero cada día de trabajo intenso puede marcar la diferencia; un afilado cada varios días o semanas según desgaste.
¿Puedo afilar con cualquier piedra?
Sí, pero es importante que tengas control del ángulo y termines con grano fino; de lo contrario la herramienta se desgasta innecesariamente o quema el filo.
¿El bruñido cambia la geometría del filo?
No, o muy poco: la función es pulir y alinear, no volver a perfilar. Si la geometría está mal, antes afila.
¿Necesito compuesto para el strop (bruñido)?
No siempre, pero usar compuesto (óxido de cromo, etc.) mejora notablemente el resultado y reduce desgaste.